“Si supiera dónde están las buenas canciones iría ahí más a menudo”, suelta pablopablo en un momento de nuestra conversación. El cantautor, compositor, productor -y tanto más- es una suerte de buscador de la canción. Los primeros hallazgos de su aventura llegaron en su primer mixtape, pablopablo (2022), pero recientemente empezó a compartir los últimos: “Otra vida”, “Despierta”, “Sidekick” (en colaboración con Guitarricadelafuente) y “Mi culpa”, el último.

Dos años después de su ópera prima, sus nuevas canciones emanan más juego y ligereza. “Mi culpa”, inspirada en el arte de José Alfredo Jiménez, evoca una nueva intención de “diva”. “Como cuando era pequeño y disfrutaba cantando canciones de pop en la ducha o frente al espejo con una botella de mentira”, recuerda. 

Perseguir la canción es una misión que afronta también como productor, una herramienta más para realizarse. Recientemente, produjo "APRENDER A AMAR" en el último álbum de Nathy Peluso y considera que es un privilegio jugar a otros sonidos desde ese lugar. "Me siento muy privilegiado en este momento. Aunque no me veo como rapero ni defiendo temas hyped o house, disfruto enormemente produciendo. Me divierto escribiendo y haciendo de todo", celebra.

Creador desde todos los frentes, prepara canciones para su próximo disco, mientras se pasea por tarimas como SONAR y se prepara para acompañar a The Marias en su gira europea.

Por Josefina Armendariz

Están sucediendo muchas cosas, ¿cómo estás con todo?

Me siento muy bien, muy bien. Escribiendo, intentando añadir más canciones a este álbum. Sino irán al siguiente, pero me gusta que la maquinaria siga siempre andando.

¿Siempre fue así?, ¿o estás en un gran momento como creador?

Siempre he trabajado disciplinadamente, pero sí, llevo alrededor de un año y medio en el que estoy muy contento con la música que estoy creando. Ha habido un cambio notable de entender qué es lo que quiero comunicar. Noto que estoy más inspirado, sí. Al principio, subí un mixtape y me di cuenta de todo lo que no me gustaba y quería cambiar. Llevo haciendo música desde pequeño, pero nunca había querido compartirla. Ahora, dos años después de empezar a lanzarla, siento que entiendo mejor qué quiero contar.

¿Por qué?

En gran parte, porque fui entendiendo mis fallos y empecé a jugar desde ahí. No hacer lo que no se te da bien y jugar a lo que sabes hacer. Sobre todo, porque produzco solo y trabajo todo solo. De repente puedo hacer un tema de house porque sé que lo puedo producir. Me puedo ir por muchas direcciones y es muy contraproducente, me puedo esparcir demasiado y no terminar entrando en nada. Pero siento que ahora estoy entrando más en la canción y un poco en la raíz de cómo me crié.

De este lado se percibe que tenés las cosas muy claras… ¿Qué te ayuda a inspirarte?

Consumí un montón de cultura de diferentes lugares. Leer, un montón. Poesía, sacar canciones que me gustan y entender porqué me gustan. Tocar en el piano e intentar algo diferente. Intento alimentarme de cosas que están ricas, sino no funciona. Pero a la vez es súper random. Leonard Cohen decía algo que me encanta y que me ha ayudado mucho, algo así como “he intentado estar sobrio, drogarme, meditar, no meditar… y nada funciona”. Si supiera dónde están las canciones buenas iría ahí más a menudo. Intentes lo que intentes, es bastante random. De repente hay meses que te toca, lo único que puedes hacer es estar ahí para atajarlo.

Entre tanto proceso, ¿cómo descubrís la frontera de una canción?

Creo que en el momento en que la escucho dándole una vuelta y no me da ansiedad. Es un momento mágico en el que escuchas y todo tiene sentido. La voz, la letra, el sonido... 

¿Qué darás a conocer en el nuevo álbum?

Creo que es una faceta más infantil e inocente de mi personalidad. No me estoy tomando tan en serio lo que hago, estoy perdiendo el miedo. Son canciones como de diva, pero no en el mal sentido. Es como cuando era pequeño y disfrutaba cantando canciones de pop como un niño cantando en la ducha o frente al espejo con una botella de mentira. Creo que esto refleja una faceta más infantil e inocente, menos preocupada por hacer la canción más original y rompedora, sino más como algo que yo disfrute cantar. 

Y entre las canciones que creás, ¿cuándo elegís la que vale la pena producir?

Es súper difícil saberlo. O sea, hay como un punto cuando pasan varios meses que está muy claro, pero en el momento es súper difícil, porque pienso que cada idea que empiezo va a ser una canción buenísima. Y a los dos minutos pienso que es lo peor del mundo. Pero eso me pasa con todas. Creo que si pasan unos meses y me sigue gustando la canción o me deja de gustar es clave. Tiene mucho que ver con, por ejemplo, si me aseguré que me gustan todas las palabras que digo. Lo que más determina es la letra para mí. Si en unos meses miro para atrás y la letra no me cuadra, se me van las ganas.

¿De dónde surgió el nuevo single?

Literalmente estaba en un karaoke con unos amigos. Venía escuchando mucha música de José Alfredo Jiménez. No creo que se escuche en la canción, pero hay algo del mensaje o la intención que llevaba buscando un tiempo. Pucho (C Tangana) me había hablado mucho de él, me dijo que tenía que “sacar cosas de él”. Entonces estaba en el karaoke y de repente pensé ”esto es increíble”. O sea, la gente se sube aquí, se canta una canción y la canta mal, pero es súper bonito. Hay como una cosa súper rara allí, preciosa, muy emocionante. Alguien se sube, como cantante tú sabes que da igual a qué escenario, sea un estadio o una sala pequeña, sientes algo visceral extraño. Entonces, yo me imaginaba a esta gente subiendo a cantar canciones. 

¿Qué lograste con esta canción?

Estoy muy satisfecho con cómo ha resultado. Es una canción súper sencilla y directa, que de una manera muy práctica recorre todo mi registro vocal, desde graves hasta falsetes, no hay una nota sin cantar. Es súper satisfactorio cantarla, me he construido una herramienta para usar al final de un show y disfrutar al máximo.

Es un gran acto de humildad decir “es mi culpa”...

Luego está el mensaje, claro. Al final, sí, casi siempre acabo escribiendo sobre esto. Björk dijo algo que me gustó y que tiene que ver con esto. Aunque escribas sobre dos personas, un personaje principal y otra persona que está con ella, esa persona puede ser un país, tú mismo, o puede ser... no importa, pero necesito la metáfora de dos personas. Yo me estoy dando cuenta de que para mí es igual. No sé muy bien sobre quién estoy escribiendo, pero hablar de dos personas que antes tenían una conexión y que ahora se sienten alienadas me resulta muy catártico. No sé por qué, pero me encanta escribir sobre esto. Sea una amistad que he perdido, o una pareja. 

Es una linda forma de leer una canción

Sí. Creo que es importante tener la licencia poética de escribir letras bien presente y tenerle respeto. Porque, al final, creo que no eres tu. Está bien pensar que no eres tú. Realmente creo que no es algo de tu vida cuando escribes. Son personajes que a ti te hace sentir bien verles hacer cosas, pero está bien separarlos de tu vida, no intentar que sea súper real, porque ¿para qué?

Produjiste para Nathy Peluso hace poquito, ¿cómo es trabajar con otros?

He llegado a un punto muy bonito en el que me siento muy privilegiado. Sé que no soy rapero, o no puedo defender un tema súper hype o house. Pero siempre me ha gustado producir eso. Me pongo a escribir cosas y realmente hago de todo porque me divierte. Es como un juego. Me siento muy privilegiado de poder tener a alguien que rapee encima de una base que he hecho yo. Es guay. Yo puedo disfrutar de esto, pero no tengo que intentar rapear encima porque no soy yo. Con Nathy hicimos un montón de ideas y me sorprendió que lo que quedara fuera el rap. Soy extremadamente fan de Kanye, me gustó mucho hacer ese beat, hacer el beat que a mí me gustaría escuchar. 

¿Y Álvaro? (Guitarricadelafuente)

Es maravilloso trabajar con Álvaro. Yo escribo mucho para su proyecto y me encanta. Realmente me ha cambiado un poco la vida conocerle a él en general. Es un tío súper mágico y talentoso. La canción que hicimos juntos fue súper guay. Nació estando en un estudio, escribiendo para él. Yo estaba tocando una idea que tenía y a él le encantó. Yo ya tenía la primera parte, los acordes y el “te duermes”, y él le añadió algo genial porque pensó esa frase de una manera diferente, como “te duermes” en un coche. Fue muy guay el twist que le iba dando cada uno a la canción.

Me da a que hicieron canción una amistad

La canción ya tiene un año y algo, la hicimos en febrero o marzo del año pasado, pero nos hicimos muy amigos después de esto. Hubo una conexión musical súper linda. Realmente me ha hecho muy feliz conocerle y ver cómo trabaja. Eso es lo maravilloso de colaborar con otras personas, se aprende mucho. Hay gente que hace las cosas de manera muy diferente a ti y siempre puedes sacar algo de ahí. Es maravilloso.

Canciones nuevas, producciones con artistas geniales, Sonar, apertura de The Marias… hay tanto que quiero que vos tomes el micrófono y me digas lo que quieras para concluir

Tengo muchas ganas de sacar todo esto, la fase que llevo trabajando este año y medio. Siento que me representa mucho y tengo muchas ganas de ver qué le parece a la gente cuando lo escuche.

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