Luke Kohen se encuentra en la intersección de la música, la sanación y la construcción de comunidades. Como artista que fusiona géneros como el hip-hop, el neo-soul y el future folk, su estilo musical diverso refleja su viaje personal.

"Mi viaje con las artes comienza en mi hogar", dice Luke. "Todos en mi familia se expresan a través de diferentes modalidades: arte, actuación, escritura, danza y música". Recuerda cómo sus hermanas compartían mixtapes de sus artistas favoritos de los años 60 y 70, y cómo sus amigos le presentaron la era dorada del hip-hop. "El álbum The Score de The Fugees es el más influyente de mis años formativos", añade con una sonrisa nostálgica.

Luke tiene objetivos que van más allá del éxito personal. "Espero construir una comunidad real donde podamos darle sentido a estos tiempos", explica con pasión. "Quiero que mi éxito conduzca al éxito de otros que compartan los mismos valores". Su visión es clara: usar su plataforma para elevar a otros, creando un efecto dominó de cambio positivo.

Los temas en la música de Luke son tan variados como sus influencias. Desde superar luchas personales hasta el crecimiento espiritual, se ve a sí mismo como un conducto para conexiones más profundas. "Siento que soy un portavoz de un despertar natural", explica. Espera que su música resuene en las personas a un nivel profundo, ayudándolas a encontrar su propósito único. "Quiero que todo el apoyo que he recibido de mis mayores y mentores, todas las historias, mitologías y sanaciones, se traduzcan para la gente", dice con convicción.

El rostro de Luke se ilumina al hablar de su próximo video y canción "Tea Life". "Rinde homenaje tanto a la cultura tradicional del té como al hip-hop", explica, mencionando cameos de amigos profundamente arraigados en la cultura del té, el taoísmo y el hip-hop. También colabora con NRYN en un EP, con tres de las cuatro canciones programadas para lanzamientos de video esta temporada.

Equilibrar roles es un baile que Luke realiza con gracia. "Mi mayor desafío ha sido estar en la carretera, además de ser un emprendedor y mentor que autofinancia mi música", admite. Sin embargo, este equilibrio alimenta su creatividad. "Siempre estoy trabajando en proyectos, canciones y colaboraciones", dice con determinación.

Su estilo musical, un rico tapiz de influencias, puede ser abrumador. "La musa es bastante constante, pero los riffs, letras, poemas y melodías son tan diversos que puede ser abrumador", se ríe. Su trasfondo en el desarrollo personal y la sanación tradicional influye profundamente en su música. "Ser un puente entre mundos no siempre es fácil", reflexiona, "pero mientras esté creando, cantando, escribiendo y grabando, mi alma está feliz".

La mitología y los marcos culturales se entrelazan en la composición y las actuaciones de Luke. "Toda la cultura está tejida por historias", afirma. Su exploración de su ascendencia celta y la tradición bardica informa su camino artístico, conectándolo con una línea de narración que une el pasado antiguo y el futuro.

"Creo que la autenticidad atrae a personas que no aceptarán nada más que autenticidad porque es medicina y es lo que se necesita en estos tiempos", dice. Los valores de Luke informan sus elecciones, ayudándolo a equilibrar sus roles como artista, mentor y activista. "La combinación de todo lo que hago está ligada a un compromiso fundamental con la vida misma", explica. Su pasión por cambiar la cultura en el planeta y apoyar a las futuras generaciones alimenta su proceso creativo y su escritura.

El viaje de Luke desde la autodestrucción hasta la autoliberación moldea profundamente su música. "Es sanar o morir", dice con voz firme. Su compromiso con la sanación y el autodescubrimiento alimenta su música, ofreciendo a los oyentes esperanza, valor y un sentido de comunidad. "Mi esperanza es que los oyentes se impregnen de la frecuencia de mi alma forjada por la vida y que se sientan menos solos en este camino".