La repentina muerte de Liam Payne, exmiembro de la icónica banda One Direction, sacudió al mundo de la música y dejó un profundo dolor en sus seguidores y compañeros de profesión. El cantante, quien falleció a los 31 años el pasado 16 de octubre de 2024, fue encontrado sin vida tras precipitarse desde el balcón de su habitación en un hotel de Buenos Aires. Este trágico suceso generó un gran impacto mediático, no solo por la naturaleza de su fallecimiento, sino también por los detalles que surgieron tras las primeras investigaciones.

El cuerpo de Payne fue hallado en el patio interior del hotel Casa Sur, ubicado en el barrio de Palermo, luego de una caída desde el tercer piso de su habitación. Según el informe preliminar de la autopsia, el músico sufrió un "politraumatismo" severo que le causó una "hemorragia interna y externa", lo que le provocó la muerte al instante. Los informes forenses, a cargo de los médicos Santiago Maffia Bizzozero y Víctor Cohen, confirmaron que Payne no adoptó una postura defensiva, lo que sugiere que estaba en un estado de inconsciencia al momento del impacto.

El informe también destaca el desorden en la habitación donde se encontraba el cantante, con la presencia de drogas, alcohol y medicamentos. Este hallazgo llevó a las autoridades a investigar más a fondo las circunstancias que rodearon sus últimas horas de vida.

Toxicología y el cóctel de sustancias

Uno de los aspectos más perturbadores de la investigación corresponde al resultado del análisis toxicológico. Según los informes difundidos por medios como TMZ y ABC News, Payne tenía en su sistema una peligrosa mezcla de sustancias, incluyendo cocaína, crack y una droga conocida como "cocaína rosa", que contiene ketamina, MDMA y otras sustancias baratas. Además, se hallaron benzodiacepinas y una pipa improvisada en su habitación, lo que sugiere un uso intensivo de drogas antes de su muerte.

Este cóctel de sustancias parece haber jugado un papel crucial en la tragedia. El consumo de drogas de esta índole puede generar efectos devastadores en el cuerpo y la mente, aumentando el riesgo de accidentes fatales, como el que le costó la vida a Payne. Las benzodiacepinas, en particular, son conocidas por sus efectos sedantes y la capacidad de provocar estados de inconsciencia, lo que refuerza la teoría de que Payne pudo haber caído en un estado de semi o total inconsciencia antes de su muerte.

Repatriación y funeral

El cuerpo de Liam Payne aún se encuentra en Buenos Aires, donde permanece bajo custodia mientras se completa la investigación y se finalizan los trámites de repatriación. El padre del cantante, Geoff Payne, viajó a la capital argentina para encargarse de los asuntos legales y preparar el traslado de su hijo de regreso al Reino Unido.

El funeral del cantante, según reportes de medios como el Daily Mail, está previsto para celebrarse en noviembre en Wolverhampton, su ciudad natal, donde familiares, amigos y fans podrán rendirle homenaje.