Con una asistencia de figuras destacadas, el evento fue un llamado a la cooperación en un mundo cada vez más dividido.
El 18 de septiembre de 2024, el icónico Théâtre des Champs-Élysées de París fue escenario de un evento cultural excepcional: el "Concierto por la Paz" de Omar Harfouch. Sin embargo, este no fue solo un concierto más, sino un evento cargado de simbolismo que buscaba, a través de la música, enviar un mensaje de unidad global y diálogo intercultural.
Liderado por el pianista y compositor libanés Harfouch, el evento combinó música clásica con influencias orientales. Bajo la batuta de Mathieu Bonnin y con la colaboración del co-orquestador Houtaf Khoury y la violinista Anne Gravoin, la Orquesta Béziers Méditerranée fue la encargada de llevar al público en un viaje musical profundamente emotivo. La velada tuvo como objetivo principal demostrar cómo la música puede tender puentes entre culturas y, en un mundo cada vez más polarizado, inspirar conversaciones sobre la paz.
El concierto congregó a cerca de 2.000 asistentes, entre ellos diplomáticos, líderes religiosos y figuras destacadas de distintos sectores, subrayando la capacidad del evento para conectar con diversas comunidades y recalcar la importancia de la cooperación y el entendimiento mutuo.
La noche abrió con "Fantaisie Orientale", una vibrante pieza que fusiona influencias musicales de Oriente y Occidente. La respuesta del público fue tan entusiasta que provocó un bis, marcando desde el inicio un tono de celebración y compromiso. Esta fusión musical reflejó la convicción de Harfouch de que diferentes culturas pueden coexistir armoniosamente, un mensaje que resonó a lo largo de toda la velada.
Uno de los momentos más emotivos fue la interpretación de "Tripoli", una pieza personal que Harfouch dedicó a su ciudad natal en el Líbano. Acompañado de imágenes de la arquitectura de Trípoli y la participación de su esposa, Yulia, la obra sirvió tanto como un homenaje a sus raíces como una reflexión sobre cómo la historia personal se entrelaza con los desafíos globales.
Un llamado a la unidad global
El momento culminante de la noche llegó con la interpretación del "Concierto por la Paz". Con movimientos intrincados que reflejan el viaje del conflicto a la resolución, la pieza se convirtió en una metáfora musical de los retos actuales que enfrenta el mundo. Harfouch, al piano, interpretó con una emoción palpable, moviéndose entre tensiones y armonías que mantuvieron al público cautivado hasta la última nota. La ovación de pie que siguió fue una muestra del impacto del mensaje transmitido.
Antes de concluir, Harfouch se dirigió al público con un poderoso llamado: "Ahora es el momento de que ustedes respondan al llamado por la paz". En ese instante, un coro de 30 voces estratégicamente distribuidas entre el público llenó el teatro con una actuación conmovedora, reforzando el mensaje central del evento: la paz no es un ideal distante, sino una meta alcanzable que exige la participación activa de todos.
Este evento es parte de una gira mundial que llevará el mensaje de Harfouch a escenarios tan emblemáticos como el Vaticano, las Naciones Unidas en Ginebra, el Parlamento Italiano y Shanghái. A través de estos conciertos, el compositor busca seguir promoviendo la paz y el diálogo entre culturas.