
El sábado 12 de abril, el predio de Tecnópolis volvió a convertirse en territorio de encuentro para la música nacional. Con su tercera jornada de la edición 2025, el Quilmes Rock reafirmó su lugar como uno de los festivales más importantes y convocantes de la cultura rockera argentina. Lo hizo como sabe hacerlo: reuniendo clásicos, tributos y una comunión generacional que muy pocos festivales logran sostener a lo largo del tiempo.
Babasónicos, Los Auténticos Decadentes, Virus, Los Tipitos y más encabezaron una grilla que apostó por el recorrido emocional, con repertorios que abarcaron desde himnos de los ’80 hasta los éxitos de hoy. Y Billboard AR estuvo allí para vivenciarlo de cerca.
Sin novedades, pero con hits de sobra: Los Auténticos Decadentes
Si de fiesta se trata, pocos nombres en la música nacional logran lo que Los Auténticos Decadentes consiguen desde hace más de tres décadas. Son, por derecho propio, sinónimo de celebración popular. La garantía de baile, canto y alegría desprejuiciada está asegurada cada vez que toman el micrófono. Y la tercera jornada del Quilmes Rock no fue la excepción.
La banda liderada por Cucho Parisi se adueñó del escenario Rock cuando la tarde caía y la luna comenzaba a asomar sobre el predio. Sin necesidad de grandes novedades ni artificios de escenografía, demostraron que lo suyo es oficio, carisma y un repertorio infalible. El público se entregó desde “Los Piratas” y siguió celebrando con canciones como “Como me voy a olvidar”, “La guitarra”, “Corazón”, “Pendeviejo” y “Loco (Por tu forma de ser)”.

Como marca registrada de sus presentaciones, hubo espacio para los homenajes. “Viejos vinagres”, de Sumo, fue el primer tributo de la tarde. Más tarde, de la mano de Dancing Mood, sumaron una versión de “Costumbres argentinas”, clásico de Los Abuelos de la Nada.
La seducción intacta de Babasónicos
Adrián Dárgelos encabezó una de las presentaciones más esperadas del tercer día. Con su habitual estética de hippie chic moderno, el líder de Babasónicos condujo al público por un recorrido donde la sensualidad y la precisión escénica se combinaron sin fisuras. La apertura llegó con “Bye Bye”, de su último disco Trinchera, para luego desatar una ráfaga de clásicos infalibles: “En privado”, “El colmo” y “Los calientes” marcaron el pulso inicial de un show que jamás cedió en intensidad. La banda desplegó su característico juego de climas, reforzando su vigencia como uno de los proyectos más sólidos y atractivos de la escena nacional.


A lo largo de un setlist que abarcó diferentes momentos de su carrera, el grupo mantuvo a su público cautivo, que cantó y bailó al ritmo de cada tema. Dárgelos, acompañado de su hermano Diego Uma, desplegó una extensa selección de canciones, entre las que se destacaron “Sin mi diablo”, “Los Calientes”, “Puesto”, “Mimos son mimos” y “Paradoja”. El cierre del show fue un verdadero estallido de clásicos: “El loco”, “Carismático”, “Yegua”, “La Pregunta” e “Irresponsables” marcaron el final de una presentación impecable.
Los Tipitos reversionan un clásico de Los Fabulosos Cadillacs
El sábado, el escenario Rock también fue testigo de la presencia de Los Tipitos, quienes aprovecharon la ocasión para seguir celebrando dos de los hitos más importantes de su carrera: el 20º aniversario de Armando Camaleón y los 30 años de trayectoria musical. Con una propuesta escénica simple, la banda logró reconectar con su público a través de un setlist que repasó sus grandes éxitos, entre los cuales no faltaron clásicos como “Brujería”, “Silencio” y “Campanas en la noche”.
El punto culminante de su presentación llegó cuando decidieron rendir homenaje a una de las bandas más representativas del rock latinoamericano: Los Fabulosos Cadillacs, quienes también fueron parte del festival el fin de semana anterior. Con un claro gesto de respeto y admiración, interpretaron su propia versión de "Siguiendo la luna", un tema que no pertenece a su repertorio pero que, según palabras de Federico Bugallo, se convirtió casi en una canción propia "porque como hijos y herederos del rock nacional es de todos nosotros".
Virus vuelve al escenario con su mística de los 80
Uno de los momentos más memorables del Quilmes Rock 2025 tuvo lugar temprano en la jornada, cuando Virus regresó al escenario que, hace dos años, fue testigo de su histórica vuelta. Con Marcelo Moura al frente, la banda se encargó de demostrar que sigue provocando la misma emoción que en los años 80. Temas como “Imágenes paganas”, “Pronta entrega” y “Dame una señal” no solo animaron a la multitud, sino que también sirvieron de recordatorio de un momento crucial en la historia del país: el regreso de la democracia y la apertura cultural que marcaron una etapa de liberación y expresión en Argentina.

Eruca Sativa electriza Tecnópolis con su energía
La tercera jornada comenzó a tomar forma hacia su cierre con una de las bandas más contundentes de la escena nacional: Eruca Sativa. En pleno proceso de producción de su nuevo álbum, el trío compuesto por Lula Bertoldi, Brenda Martin y Gabriel Pedernera ofreció un espectáculo cargado de adrenalina. La banda, que logró establecerse como una de las principales exponentes del rock alternativo argentino, mantuvo a la multitud en Tecnópolis hasta el último instante, interpretando no solo sus clásicos sino también un homenaje como "Corazón Delator" (Soda Stereo) y también dando algunos anticipos de su esperado próximo disco, el cual estarán presentando el 12 de julio en el Estadio Obras.