
Una frase, una respuesta y ningún comentario adicional. “And if you go forward…”, publicó Stevie Nicks en Instagram. “I’ll see you there”, escribió Lindsey Buckingham días más tarde. No hubo foto, ni contexto, ni explicación: solo un verso compartido que bastó para reactivar los rumores acerca de una reconciliación de los integrantes de Fleetwood Mac.
La cita pertenece a “Frozen Love”, la canción que cierra Buckingham Nicks (1973), el único disco que grabaron juntos antes de sumarse a la banda que los llevaría al estrellato. Aquel álbum pasó desapercibido en su momento, nunca fue editado en CD ni digitalizado oficialmente. Pero hoy funciona como prólogo de una historia atravesada por el amor, el desencuentro, la ambición y la creatividad bajo presión.
Desde 2018 no se registraban señales públicas de diálogo entre ambos. Ese año, tras desacuerdos vinculados a la organización de una gira, la banda decidió continuar sin Buckingham. Nicks permaneció en el grupo; él siguió por su cuenta, aunque una cirugía cardíaca en 2019 ralentizó su actividad. El reciente cruce en redes representa el primer gesto visible desde aquel distanciamiento y generó nuevas especulaciones sobre una eventual reconciliación artística.
El drama pop de Fleetwood Mac
Su historia comenzó en California, a fines de los años sesenta. Se conocieron en la secundaria Menlo-Atherton, pero fue en 1971 cuando iniciaron su colaboración musical. Él tocaba “California Dreamin’” en una reunión; ella improvisó la voz. Poco después iniciaron una relación y se mudaron juntos a Los Ángeles, formaron Buckingham Nicks y en 1973 publicaron un disco homónimo producido por Keith Olsen. El álbum no logró impacto comercial, pero llamó la atención de Mick Fleetwood, quien buscaba un guitarrista para revitalizar la formación.
Fleetwood quedó impresionado por el estilo de Buckingham, pero aceptó incorporarlo bajo una condición: que Nicks también ingresara. Así, en 1975 ambos pasaron a integrar Fleetwood Mac. El álbum homónimo de ese año, con canciones como “Rhiannon” y “Landslide”, marcó un cambio de rumbo, pero sería Rumours (1977) el que los catapultaría a la cima, en medio de un caos interno. Nicks y Buckingham ya no estaban juntos, Christine y John McVie se separaban, y los cinco integrantes atravesaban crisis personales mientras grababan uno de los discos más influyentes de la historia.
Obviamente, buena parte de la potencia del álbum residía en esas tensiones. “Go Your Own Way”, compuesta por Buckingham, fue una despedida áspera dirigida a Nicks. Ella contestó con “Dreams”, el único número uno de la banda en Estados Unidos. A partir de allí, la tensión creativa se convirtió en método.
Durante décadas, compartieron escenario sin resolver del todo su vínculo, y la interpretación de “Silver Springs” en 1997, durante la gira The Dance, lo dejó en evidencia. Nicks interpretó frente a él una canción compuesta en los años 70, que había quedado fuera de Rumours por decisión suya. “You’ll never get away from the sound of the woman that loves you”, le canta, mirándolo fijo. Él sostiene la mirada apenas. El momento fue registrado y circuló durante años como una de las escenas más intensas del pop en vivo.
La relación volvió a tensarse en 2018. Según Buckingham, fue despedido sin previo aviso. Según la banda, no aceptó las condiciones del tour. Las declaraciones posteriores de Nicks señalaron que la relación entre ambos había llegado a un punto insostenible. El grupo siguió adelante con Neil Finn (Crowded House) y Mike Campbell (Tom Petty and the Heartbreakers) en la nueva formación.
La muerte de Christine en 2022 marcó un punto de inflexión. Desde entonces, Fleetwood Mac no volvió a reunirse ni se anunciaron proyectos futuros. Con Buckingham apartado y Nicks enfocada en su carrera solista, la posibilidad de un nuevo capítulo parecía cancelada, hasta ahora.