El Lollapalooza tiene una virtud especial, y es la garantía de que, siempre, algún show va a sorprender. En el caso del día 1, los Twenty One Pilots fueron la revelación con una presentación en vivo frenética.
La banda está formada por dos jóvenes desquiciados que con elementos del pop, del hip hop y del indie crearon el schizoid pop (pop esquizoide), un género centrado en la forma de cantar y en las palabras urbanas más que en el fondo instrumental. Conversamos con Josh Dun, su baterista.
Stressed Out lleva 22 semanas en el Hot 100 de Billboard, y llegó al N° 2. ¿Cómo tomaron esta escalada?
Es algo muy loco. Es cool cuando grabás un disco y no estás pensando en qué canción la va a pegar o va a ser exitosa. No es que estemos diciendo “esta canción va a llegar a la cima de Billboard”. A nosotros solo nos gusta tocar. Es interesante saber que nosotros no la hicimos pensando en que suene en la radio o llegue a los puestos. Pero, la verdad, está bueno.
Para su último disco, Blurryface, eligieron distintos productores en base a lo que cada canción específica necesitaba. ¿Por qué tomaron esta decisión y cuál fue el balance?
Para serte honesto, fue algo que nos dio miedo. Para mí, el lazo y la relación que se crea con el productor es algo sagrado, porque como artista estás en una situación realmente vulnerable compartiendo tus ideas con otra persona. Crear ese lazo con un productor por una o dos canciones y luego irse con otro para la siguiente, puede ser algo muy interesante. Afortunadamente, salió bien. Hubo diferencias, pero creamos relaciones fuertes y trajeron buenas ideas a la mesa. Tratamos de ser sutiles con quién iba a trabajar con cada canción, y desarrollamos amistades con ellos, fue un proceso divertido. El dúo trabajó en varios estudios en Los Ángeles con Mike Elizondo, Tim Anderson y Ricky Reed y luego se fue a Londres para grabar con Mike Crossey en Livingston Studios. La idea era que cada productor trajera un conjunto de habilidades diferentes que podrían amplificar mejor lo que la música necesitaba.
Además de la experiencia, tienen la ventaja de conocer muchos productores para trabajar en el futuro…
Sí, probablemente volvamos a trabajar con algunos de ellos.
En vivo son muy activos, ¿cómo es la química en el escenario con Tyler?
Tremenda. Yo estuve en otras bandas e hice música con otras personas, pero con Tyler hay una conexión que no había tenido en toda mi vida con otro músico. Apenas nos conocimos, nos dimos cuenta de que estábamos en la misma página en varios aspectos. Es cool poder compartir una banda con alguien así. Recabamos información de los shows, y es muy divertido ver de qué manera va a responder la gente y cómo van a disfrutar la música
Tengo entendido que algunas letras están inspiradas en conversaciones con fans y personas que se les acercan…
Muchas de las canciones que hicimos son inspiradas en conversaciones que tuvimos. Algunos, cuando se encuentran vulnerables por alguna razón, deciden confiar en nosotros y nos cuentan sus historias. Mientras más conversaciones tenés, te das cuenta por los momentos en los que va pasando cada uno. A mí, en particular, la música me ayudó a pasar por momentos difíciles, y sé que mucha gente se siente de la misma manera. La música te abre para hablar de ese tipo de cosas. Me ayudó en tantas cosas en la vida, y ahora ser parte de algo que puede ayudar a los demás es increíble
¿Cuáles son las influencias de la banda?
Eso es muy difícil de responder, son muchas. Crecimos escuchando un poco de todo, somos parte de una generación que le gusta toda clase de música: hip hop, rap, rock, pop, reggae, punk rock. Yo tomo un poquito de cada cosa, incluso a inlveces estás en un café o en un shopping y escuchás algo que te gusta y no tenés idea de quién es, pero te termina influyendo.