
Corría el 2015 cuando el germen de Steady Rollin comenzó su travesía. Fue tras un duro relevo de Fernando Poma, su vocalista, que el propio músico define como “un despertar” en su vida. Entonces, con sus años de oficio como respaldo indiscutible y el reconocimiento como líder de negocios en Latam, escogió aventurarse en busca de sus sueños.
La vida artística jamás le había sido ajena; la conocía de primera mano. Pero aún con sus numerosas vicisitudes, ciertas hazañas parecen ser obra del destino. El arribo de Steady Rollin en la escena musical de la región se vio sorprendido por una aceptación inesperada, traducida en más de 10 millones de reproducciones.
La aprobación del público representa, para todo músico, el mayor desafío de todos. Y es que salvando contadas excepciones, requiere de harto trabajo y compromiso, el mero hecho de ser escuchado, especialmente si de un intento por crear hits se trata.
“Keep on moving soldier’ is what I keep saying to myself / I can’t stay here, where I may never be found, lying here on enemy ground”, en español: “Siga adelante, soldado, es lo que continúo diciéndome / No puedo permanecer aquí, donde puede jamás sea encontrado, tendido en territorio enemigo”, expresa la letra de la canción.
Junto al bajista y guitarrista Jerry Pardo, y el baterista Benjamín Andrade, Fernando Poma comenzó a interesarse por la música en 1994, volcando su experiencia a las composiciones de Steady Rollin, con su particular velo de melancolía.
A lo largo de su carrera, el conjunto ha sido merecedor de múltiples reconocimientos, entre los que se encuentran el Premio del Público El Salvador en los Premios Estela de Guatemala 2018; Mejor video en “Viva la Mañana” (2018 y 2022); y Mejor canción de rock en “Música503”.
Hasta hoy, Steady Rollin ha brindado múltiples conciertos en Latinoamérica y sus integrantes permanecen maravillados ante los frutos de su trabajo: "Fue muy sorprendente ver que en otros países cantaban nuestras canciones", sintetiza Fernando al respecto.