
Durante más de dos años, asistió como observadora a audiencias judiciales en el condado de Prince George, Maryland. Allí fue testigo de cómo numerosas personas eran privadas de su libertad por el simple hecho de no tener recursos para pagar una fianza. Fue esta experiencia la que se convirtió en el impulso para componer una canción que denuncia una realidad. Y hoy, después de cinco años, Fiona Apple vuelve a la música con “Pretrial (Let Her Go Home)”.
La canción no llega sola. Es el resultado de años de voluntariado y compromiso con el colectivo Free Black Mamas DMV, que lucha por la libertad de madres negras detenidas preventivamente. La producción de la canción, a cargo de Zealous y Special Operations Studios, es austera pero contundente, acá lo que importa es lo que la cantante neoyorquina tiene para decir.
“Durante los últimos cinco años, he sido voluntaria en el programa de rescate de Free Black Mamas DMV, y he tenido la suerte de presenciar las historias de mujeres que lucharon y lograron su libertad con el apoyo incansable y cariñoso de sus líderes”, escribió la artista en un comunicado.
Y continuó: “Espero que esta canción, y las imágenes que compartieron conmigo, ayuden a mostrar lo que está en juego cuando alguien se encuentra en prisión preventiva. Ofrezco esta canción con respeto y amistad a todos los que han experimentado el dolor de la prisión preventiva y a las mujeres líderes del grupo que me han enseñado tanto y a quienes amo profundamente”.
¿Se vendrá un disco puramente social? ¿Es este el retorno después de Fetch the Bolt Cutters (2020)? ¿Dejó de lado el sufrimiento personal para hacer algo más colectivo? Después de aquel álbum en el que volcó su tormenta interna en piezas llenas de catarsis, este nuevo sencillo sugiere una transformación: ya no solo se trata de procesar el dolor propio, sino de amplificar el grito de quienes lo enfrentan en silencio.