La Academia Latina de la Grabación presentó las Acoustic Sessions en la ciudad de Buenos Aires, con la participación de Carlos Vives −ganador de 11 Latin Grammy y dos Grammy−, y Soledad −ganadora del Latin Grammy en la categoría Mejor Álbum Folclórico−.
El evento en la Usina del Arte, que estuvo animado por Axel y Lali, acogió a grandes figuras de la música, celebridades e influencers. Entre ellos estuvo Abel Pintos, el músico que terminó el 2017 con dos shows en el estadio de River Plate conversó con Billboard y Coca-Cola For Me sobre el crecimiento de la música latina a nivel mundial. Además, el intérprete de Once resaltó el rol de la música Argentina como gen y semilla de muchos artistas de América Latina. “Yo estoy teniendo la oportunidad de dar mis primeros pasos en otros países y pude descubrir que las bandas fundamentales de estos países en la creación de su música son Argentinas. Me emociona mucho cada vez que descubro eso y por eso, me ilusiona estas nuevas generaciones tengamos la oportunidad y el espacio de poder llevar nuestra música a otros países”, dijo Pintos.
Las Acoustic Sessions son una serie de conciertos exclusivos que conectan en vivo a audiencias con algunos de los más talentosos artistas latinos de la actualidad. Este año, la serie se inició en la Ciudad de México, continuó en Buenos Aires y seguirá en otras importantes ciudades de Latinoamérica y Estados Unidos. “Me parece muy importante el hecho de que un premio tan significativo para la música latinoamericana venga a la Argentina a sondear lo que está pasando con estas nuevas generaciones están generando en todo el mundo”, comentó sobre el evento y agregó: “Es el primer paso para que la música argentina pueda tener otra llegada a otros lugares”.
Hubo dos años de gran expansión de la música latina a nivel mundial, ¿qué balance hacés?
– Sí, también de creación de géneros. Eso siempre es muy sano para la música y la cultura. Sobre todo para no perder la sensación y poder crear la certeza de que en la música hay mucho para hacer constantemente. Porque eso de que en la música ya está todo inventado no es cierto. Todavía hay mucho para hacer y la música latina tiene mucho por lograr, al igual que la música en todo el mundo. Tienen que existir artistas latinos que puedan provocar los genes de otro lado del mundo.
Has ganado muchos premios, llenaste dos River, pero el ser humano a veces es ingrato, ¿cómo hacer ahora para seguir manteniendo los pies en la tierra?
– Ir por más tiene que ver con una cuestión de ilusiones y ambiciones. Eso se genera, me parece a mí, en el punto inicial donde uno siente que tiene mucho para aprender. A mí me han pasado muchas cosas en mis 22 años de música, pero todavía siento que adolezco en mucho conocimiento. Mientras tenga cosas para aprender, voy a tener más herramientas para poder construir más cosas. Si el día de mañana hago un balance, y me doy cuenta que tengo más anécdotas que contar que cosas por aprender… probablemente empiece a pensar en hacerme a un lado. Pero todavía tengo mucha curiosidad, eso alimenta la sana ambición artística y la ganas de querer hacer cosas constantemente. Lo de los pies en la tierra es siempre un poco lo mismo para todos; tu círculo más íntimo y la gente que te quiere. Yo, por ejemplo, soy un hombre de fe, y la fe es un lugar donde hacer pie pero sobre todo no perder nunca de vista de porque hacer lo que hacés. La música es mi forma de comunicar y de hablar con los demás. Me gusta mucho conversar, pero siento que todavía soy más certero cuando canto las cosas que quiero decir. Mientras sea así, voy a seguir teniendo mucho estímulo.
Abel se tiene que venir otra tapa…
– Claro, desde ya, aquella todavía está colgada en mí casa. Es importante para mí ese espacio y les agradezco de todo corazón. Siempre hemos tenido acercamientos muy amistosos y es un placer.
Si tuvieras que elegir a un solo artista del mundo, desde Mozart hasta la actualidad, ¿quién sería?
– Sandro, sin dudas, fue el astro de la música latinoamericana.